sábado, 14 de febrero de 2009

VOY D´ESPAÑA


Siempre he sostenido que el último vuelo a Ginebra era el mío. Que cuándo este país sin almidón pero con saña, fuese de lo peor (¿cuántas veces más?), no dejaría agostarse al pasaje, no me vacilaría la mano, cogería al lobo que llevo dentro y ¡a pasear!. Decía Matzinger-Z y Afrodita-A, puños fuera y pechos fuera,( uno es el único habitante de su infancia). A veces sólo en régimen de re-alquilado. Sin miedo a cometer pecado de distancia.


Así que en estos momentos terribles de la separación (se cambia terminal-4 Barajas, ¿Adolfo Suarez?, por terminal-2, Indira Gandhi), cojo la navaja afilada de someter el rostro, descorcho la última reserva de la Heredad 2004, me dejo planchar y doy pedacitos del que soy a los amigos, a los míos, por si acaso. Si no he mencionado a alguien en mis oraciones, lo nombro ahora.
Y el caso es que no sé volar sino es con una mano amiga o amante. Como follar en el aire. Decía Oliveiro Girondo, “sino sabes volar pierdes el tiempo conmigo”. Qué le vamos a hacer. Parafraseando a Aleixandre, la noche será larga, pero habrá pasado.


Se acabaron las citas, cenaremos con Finair, que es mujer nórdica y cantarán los gallos (en Nueva Delhi se escuchan toda la noche los perros). Cata que amanece, dice el romance. Nada de citas, comeremos con tandori y dhal, nam y en el bar Amber (Pahar Ganj) dejaremos un CD Caso de la Habana. Entretanto se acabaron las citas, no más exhibiciones del mâitre, no más brindis al sol, a la sombra. Dentro de 48 horas me sentaré en la calle, me dejaré lamer por el lisiado que culpa a la luna, encenderé los sebos de Shiva, franquearemos las vacas sin leche, sonreiré con dientes de betel, procuraremos el momento toallita húmeda con el pudor, beberemos zumo de caña reciente, nos cobijará todo el Olimpo de los dioses que se enchufan a la red eléctrica sin permiso de nadie.


Nada de citas, que Benarés aguarda, no se rompa el hechizo. Apuntalo a Tom Waits contra la pared, lustro la botas, registro límites razonables para el tubo de dentífrico (durante quince días) y sacrifico en honor de India (que ahora es perra y ladra, re-encarnación de las re-encarnaciones y todo re-encarnación), mi último plasma.


Nada de citas. El plasma es rojo. Voy d´España.

2 comentarios:

  1. Queridos expedicionarios:
    A vosotros, gallegos y castellanos,
    a los comerciantes intrépidos de la
    muy real cofradía de los marcopolienses y
    a los buscadores de páginas carcomidas
    que memorizar para enfrentarse al primer Bardo
    con alguna garantía:
    ¡¡¡¡Que tengáis un aterrizaje perfecto,
    en Barajas!!!!
    Os estaremos esperando.

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  2. Claro ser buenos, por el tema de los bardos que se hace referencia en el famoso libro Tietano de los muertos, los bardos son las fases por las que se pasa antes de llegar a la reencarnación. Hay un libro que se basa en el anterior The Psychedelic Experience.

    Espero que lo paseis muy bien

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