Cuando se desplomaba la noche, cosa que ocurría a eso de las 18 h., que ocurría para casi toda la ciudad debido a los cortes de energía (16 h. al día), Babu nos recibía en el locutorio del barrio de Thamel, con su sonrisa de muñeco roto. Es guardia jurado en Kathmandu.
Babu había sido guía de montaña, junto con su hermano (ahora en un, confío que feliz, destino en los Emiratos) y un día dejó de serlo. La historia no es sencilla si se tiene en cuenta que él utiliza un inglés en el que wife equivale a way y three es igual a tree. Se consuela uno al descubrir que fuera del local ocurre otro tanto, y que su mandíbula rota en muliples fragmentos, apenas es la causante de tales deslices (nadie tiene obligación de hablar nuestro inglés kentacky de barra).
Babu participó por última vez en un trek de Johnson, que había realizado muchas veces acompañado de su hermano ausente, esa ocasión, en los Annapurnas.
Babu bebe de tu petaca y permite que le invites a una cerveza Everest, se compromete a abrirte el local cuando esté cerrado (duerme en un sofá allí dentro, los sábados vuelve a su aldea).
Casí no gana para su tratamiento médico.
(Ayer recibimos un mail suyo, que firma "yours Babu". Creo que no sabe nada de la gesta de Edurne)
No hay comentarios:
Publicar un comentario